Lola Grande. La Jefa.


ACADEMIA GRANDE LolaNo recuerdo cuando empecé de a dar clases. Hace poco quedé con uno amigos del colegio, no nos habíamos vuelto a ver desde entonces y alguien me dijo: «Yo de ti, me acuerdo, sobre todo, cuando nos explicabas los problemas en la pizarra a los que no los entendíamos» y le contesté: «Pues eso es lo que sigo haciendo explicando problemas en la pizarra«. Cuando estudiaba en el instituto, daba algunas clases particulares a mis compañeros, y ya en la Universidad estas clases se convirtieron en mi «modus vivendi».

En aquella época, en los veranos, me iba a Londres y buscaba algún trabajillo que me permitiera sobrevivir y mejorar mi inglés. Mi primer trabajo serio fue dando clases de Inglés para una Academia en Alcorcón, nunca planeé que tendría mi propia Academia, fue algo que poco a poco fue surgiendo. Me di cuenta de que era algo que hacía bien, explicar las cosas, pero sobre todo fui rápidamente consciente de que disfrutaba haciéndolo, que me gustaba la relación que existía entre mis alumnos y yo.

No tarde en decidir abrir mi propia Academia en Móstoles, donde vivo. En un principio, era de Inglés y Mecanografía, pero como soy una apasionada de las ciencias, seguí formándome de manera autodidacta en otras asignaturas. Llegó La Física, La Química y ,sobre todo, Las Matemáticas, que, junto con La Filosofia , materia en la que soy licenciada universitaria, son mi verdadera pasión.

Empedernida lectora y viajera, no me podía olvidar de La Literatura, La Lengua y La Historia, que son esenciales para comprender el mundo en que vivimos.

Hoy para mí, este centro, ACADEMIA GRANDE, es mucho más que un simple trabajo. Por aquí han pasado cientos de alumnos, todos ellos han sido únicos para mi; de algunos me acuerdo muy bien, de otros menos. Pero a todos ellos les doy las gracias porque me han permitido vivir haciendo lo que me gusta, realizarme como persona, cumplir sueños y me han obligado y siguen haciéndolo a seguir formándome, a segur creciendo.

Aún hoy en día, sigo emocionándome, cuando uno de esos alumnos «negados» para las mates me trae un exámen aprobado y no, por la nota, si no por su cara cuando me lo dice. Recibo permanentemente WhatsApps: «Lola!!!! He aprobado el examen!!!» y se me escapa una sonrisa que resume mi enorme satisfacción.  y no os digo nada cuando me cuentan algo en Inglés,  uno que cuando llegó no podía decir ni «hello!». Vivo con mis chicos y mis chicas los nervios de la selectividad, de los parciales, de los finales. Les regaño, me enfado, me río, les animo cuando están desanimados con una materia, les hago trabajar cuando están perezosos, En esas tardes de mayo en las que hace sol y buen tiempo y tienen 15.16, 17 años, estar en plena adolescencia y un examen, dos cosas altamente incompatibles con la primavera, ahí estoy repasando con ellos, estudiando con ellos. Les enseño mucho, pero sobre todo nunca han dejado de enseñarme a mi.

Que os puedo decir, este es mi proyecto, y estoy muy feliz de que lo sea. Sois libres de elegir el centro al que acudir, pero si vives en Móstoles, y necesitas ayuda, danos la oportunidad de conocerte y déjanos que te ayudemos.